Crear unas bases sólidas para medir la incidencia de los delitos cibernéticos

29 de octubre de 2020
INTERPOL y el Consejo de Europa cooperan en el marco del proyecto GLACY+ con el objetivo de publicar un manual para la recogida de estadísticas de justicia penal sobre la ciberdelincuencia y las pruebas electrónicas

SINGAPUR – Muchos países reconocen la necesidad de tomar medidas encaminadas a combatir la ciberdelincuencia, pero experimentan dificultades para definir el problema en sí.

Para hacer frente de manera eficaz a unos ciberdelitos multifacéticos e intangibles, los órganos de justicia penal han de comprenderlos bien y conocer su volumen, los diferentes tipos que se presentan y la incidencia que tienen. Por ello el Consejo de Europa e INTERPOL han elaborado conjuntamente un manual para la recogida de estadísticas de justicia penal aplicadas sobre la ciberdelincuencia y las pruebas electrónicas, con el propósito de ayudar a los países a hacerse una idea más clara de este problema mundial.

El objetivo fundamental de esta labor conjunta es ayudar a las autoridades de justicia penal de todo el mundo a reunir estadísticas sobre la ciberdelincuencia y las pruebas electrónicas, para lo cual se les proporcionan buenas prácticas y recomendaciones. Las estadísticas permiten a las instancias directivas elaborar respuestas operativas y directrices eficaces. El manual, en el que se expone el programa previsto para recabar estadísticas de justicia penal, contiene las principales etapas para la recopilación y el análisis de datos y la cooperación entre las distintas partes interesadas.

"Unas estadísticas bien definidas, elaboradas en colaboración con las autoridades de justicia penal, no solo aportarán valiosos conocimientos sobre el entorno cambiante, sino también unos indicadores estratégicos que servirán para medir la eficacia de las directrices y las actividades", indicó Alexander Seger, jefe de la División de Ciberdelincuencia del Consejo de Europa.

"La forma en que los países actúan contra la ciberdelincuencia y tratan las pruebas electrónicas a escala nacional repercute grandemente en las posibilidades de cooperación a escala mundial. También sienta las bases para elaborar unas respuestas operativas adaptadas a las necesidades de cada país, que permiten reducir los efectos de estos delitos en todo el mundo", señaló Craig Jones, Director de Ciberdelincuencia de INTERPOL.

INTERPOL y el Consejo de Europa seguirán cooperando para mejorar las capacidades de los órganos de justicia penal de todo el mundo con miras a combatir la ciberdelincuencia y fomentar la cooperación internacional en la recopilación y el análisis de pruebas electrónicas.