Por qué la elección del Presidente de INTERPOL ha sido justa y democrática

5 de noviembre de 2008

Estimado señor:

Le escribo en relación con el artículo sobre las elecciones a la Presidencia de INTERPOL titulado “Votos africanos marcan derrota de Herrera en la elección de INTERPOL”, publicado por “El Mercurio” el 11 de octubre. El título del artículo y su contenido son falsos y engañosos. De hecho, dado que la votación fue secreta, es imposible y erróneo atribuir la responsabilidad de la derrota del Sr. D. Arturo Herrera Verdugo a una sola región de INTERPOL. Antes de escribir la presente carta quería tomarme tiempo para consultar con todas las partes implicadas, a fin de determinar la fuente original de la información errónea. Aunque reconozco que tal información no partió de “El Mercurio”, su distribución agrava el engaño y la confusión relacionados con ella.

La única conclusión válida que es posible deducir de la elección del Sr. Khoo como Presidente de INTERPOL es que, ante el dilema de elegir entre dos altos dirigentes policiales altamente cualificados para ocupar la Presidencia de INTERPOL, la Asamblea General de la Organización optó por el Sr. Khoo y no por el Sr. Herrera Verdugo.

El Sr. D. Arturo Herrera Verdugo ha trabajado varios años para la Organización desde su puesto en el Comité Ejecutivo y es un reputado Jefe de Policía. Ha desempeñado su labor como Presidente interino de INTERPOL con un máximo de celo y profesionalismo. Ha demostrado con claridad que posee todas las cualidades que hubieran hecho de él un buen Presidente de INTERPOL, pero la realidad es que la Asamblea General de la Organización eligió por abrumadora mayoría a otro candidato, el Sr. Khoo, que tenía a sus espaldas un historial de liderazgo igualmente admirable. El Sr. Khoo ha ocupado la Jefatura de la Policía de Singapur desde 1997, ha sido el último Presidente del Subcomité de Desarrollo Estratégico de INTERPOL y durante varios años ha colaborado activamente con la Organización en su conjunto.

Por consiguiente, resulta muy lamentable que un diario tan respetado como el suyo publique la siguiente falsedad y, de ese modo, induzca a error a sus lectores: “El singapurense Khoo desplegó una campaña comprometida con los estados africanos más necesitados de recursos, lo cual inclinó la elección a su favor, logrando una amplia mayoría en la votación secreta”. Esta falacia cuestiona la integridad no sólo de los países miembros africanos de INTERPOL y de nuestro recién elegido Presidente, sino también la de toda nuestra Organización, compuesta por 187 países miembros. Tanto el Sr. Khoo como el Sr. Herrera Verdugo prometieron ayudar a los países más pobres de INTERPOL porque de ese modo contribuyen a fortalecer la totalidad de la Organización. Asimismo, puedo asegurarle personalmente que la elección como Presidente del Sr. Khoo no puede explicarse por el apoyo de una única región. Este fue elegido en la primera votación al contar con el apoyo de casi el 75% de los países miembros de INTERPOL que participaron en ella. Por lo tanto, la opción a favor del Sr. Khoo tomada por la Asamblea General de INTERPOL refleja la abrumadora voluntad, democráticamente expresada, de un elevado número de países miembros de la Organización, no la necesidad de recursos de una región específica de INTERPOL.

Para terminar, permítame añadir que tanto INTERPOL como yo mismo, en mi calidad de su Secretario General, hemos disfrutado de una larga y privilegiada relación con Chile, con el Sr. Herrera Verdugo, con la Policía de Investigaciones de Chile y, especialmente, con los competentes funcionarios policiales chilenos que han ocupado importantes puestos en nuestra sede de Lyon (Francia) y en nuestra Oficina Subregional de Buenos Aires (Argentina). Su país y sus ciudadanos tienen buenas razones para estar orgullosos de sus funcionarios policiales.

En estos tiempos difíciles cualquier indicio de incorrección en el trabajo policial o el hecho de atribuir la responsabilidad de la pérdida de unas elecciones a un grupo concreto de países podrían disminuir la eficacia de nuestra relación profesional y de la cooperación policial a escala mundial, lo cual sería ciertamente un resultado deplorable.

Por todas las razones indicadas, le ruego que hable con las partes implicadas y que se retracte de la información errónea contenida en el mencionado artículo.

Le saluda atentamente,

Ronald K. Noble
Secretario General
INTERPOL