SAN SALVADOR (El Salvador) – Una operación contra las armas de fuego ilícitas coordinada por INTERPOL ha conducido a la detención de 560 personas en toda Latinoamérica, así como a la incautación de cientos de armas de todo tipo.
La operación, que fue bautizada con el nombre Trigger V, se llevó a cabo durante una semana (del 22 al 28 de febrero) en ocho países y contó con la participación de agentes de policía, aduanas e inmigración y de efectivos del ejército, así como de peritos de laboratorios de balística.
En los 42 000 controles realizados en puntos críticos de toda la región, entre ellos puestos fronterizos aéreos, marítimos y terrestres, también se aprehendieron drogas, vehículos robados y 162 000 USD en efectivo.
La operación Trigger V, dirigida por el Programa de INTERPOL sobre Armas de Fuego, fue coordinada a través de la Oficina Regional de esta organización en San Salvador y la sede de su Secretaría General, sita en Lyon (Francia).
Participaron en ella los siguientes países: Belice, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México y Panamá.
Detenciones destacadas
La operación permitió practicar importantes detenciones, incluida la de una persona objeto de una notificación azul de INTERPOL en la que se solicitaba información suplementaria sobre un sospechoso conocido como “Zeus o Mono”, que presuntamente dirigía una red transnacional de traficantes de armas responsable del suministro de armas al Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia.
El sospechoso fue interceptado mientras viajaba ilegalmente de Guatemala a Honduras, y desde entonces ha sido deportado a Colombia, donde será juzgado.
Otras detenciones destacadas fueron las de las personas siguientes:
- 1 ciudadano hondureño objeto de una notificación roja de INTERPOL por numerosos delitos relacionados con las armas de fuego y las drogas;
- 47 personas detenidas en El Salvador, 18 de las cuales tenían vínculos con pandillas como las denominadas “Barrio18” y “MS13”;
- varios presuntos miembros de bandas colombianas, entre ellas las denominadas “Galería” y “Los Shibly”.
El Secretario General de INTERPOL, Jürgen Stock, declaró que la operación y las detenciones constituían un paso importante para la desarticulación de las redes ilícitas y la protección de los ciudadanos.
“La facilidad de obtención y utilización de armas ilícitas suponen un grave peligro para la seguridad, la estabilidad y el desarrollo en todos los países del mundo, a la vez que proporcionan a los delincuentes una lucrativa fuente de ingresos.”
Objetos incautados: armas, balas, granadas y uniformes
Tras siete días de acción coordinada, se aprehendieron 857 armas de fuego, así como más de 38 000 balas, 20 granadas y diversos uniformes policiales y militares.
En un control de vehículos llevado a cabo en Costa Rica se descubrieron dos fusiles de asalto AK47, uno de los cuales había sido registrado en la base de datos iARMS de INTERPOL por un país del Próximo Oriente, lo que puso de manifiesto el carácter transcontinental del tráfico de armas de fuego.
Las autoridades mexicanas publicaron dos notificaciones moradas para alertar sobre sendos métodos empleados para el contrabando de armas y municiones a través de la frontera entre los Estados Unidos y México. El primero consistía en ocultar balas en compartimentos secretos habilitados en los asientos de automóviles, y el segundo se basaba en desmontar armas de fuego y enviarlas por medio de empresas de mensajería urgente.
En Panamá, la operación dio lugar a un aviso anónimo que condujo a la policía a un almacén aislado que estaba lleno de municiones, armas de fuego y litros de productos químicos y sustancias explosivas.
Base de datos iARMS de INTERPOL
Cabe destacar que la operación condujo a un importante aumento de la utilización de Sistema de INTERPOL para la Gestión de los Registros y el Rastreo de Armas Ilícitas (iARMS). Los países participantes añadieron más de 125 000 registros, 58 000 de los cuales fueron aportados por un solo país: México.
La base de datos iARMS, financiada por la Unión Europea, contiene más de 1 300 000 registros.
Las policías de todo el mundo pueden consultarla para comprobar si un arma de fuego incautada ha sido objeto de una declaración de pérdida o robo transmitida por otros países.
En el curso de la operación Trigger V se generaron 14 coincidencias con armas previamente registradas en la base de datos. Estos resultados positivos se analizarán para descubrir nuevas actividades de tráfico y nuevas rutas de contrabando.