México y Colombia desarticulan una red de trata sexual transnacional

12 de julio de 2024
El grupo explotaba a mujeres jóvenes vulnerables

Lyon (Francia) – Las fuerzas del orden de las Américas, con apoyo de INTERPOL, han desarticulado una red delictiva dedicada a la trata de mujeres colombianas en México, lo que ha llevado a la detención de los dirigentes de la red y al rescate de ocho víctimas.

Distintas fiscalías especializadas y unidades policiales de investigación, así como las Oficinas Centrales Nacionales de INTERPOL en México y Colombia, participaron en una operación coordinada que permitió la detención en Medellín (Colombia) de un ciudadano cubano-mexicano que era el dirigente del grupo, y en Yucatán (México) la de su principal cómplice. México buscaba a ambos sospechosos, que eran objeto de sendas notificaciones rojas de INTERPOL.

México: Las fuerzas del orden realizaron redadas en pisos francos y bares.
Colombia: El dirigente del grupo fue detenido en Medellín
Detención en Colombia.
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Un entramado lucrativo que utilizaba a mujeres jóvenes

La policía tuvo noticias del grupo delictivo por primera vez en junio de 2022, cuando unas víctimas consiguieron escapar a la red en México y relataron sus traumáticas experiencias a las fuerzas del orden. El grupo buscaba víctimas jóvenes, que solían provenir de medios desfavorecidos de Cali, Medellín y Bogotá, y les prometía trabajo como camareras o recepcionistas en Cancún y Mérida.

Según permitieron descubrir las investigaciones, las víctimas recibían a continuación una carta de invitación "oficial" para facilitar su acceso a México. Una vez que llegaban al país, eran recibidas por miembros del grupo delictivo, que las llevaban a pisos francos y les confiscaban el pasaporte. A continuación eran obligadas a firmar contratos por los que contraían deudas exorbitantes, que tenían que pagar efectuando trabajos sexuales en bares que, según la información recibida, pertenecían al dirigente del grupo.

En México, agentes de la Fiscalía General de la República realizaron redadas en viviendas y bares, y consiguieron rescatar a las víctimas y detener a la mujer que presuntamente dirigía las operaciones en Mérida.

En Colombia, las fuerzas del orden descubrieron que el supuesto dirigente de la red había estado llevando un estilo de vida ostentoso, vivía en una lujosa casa de campo y viajaba en vehículos blindados de alta gama, con un grupo de guardaespaldas. Se cree que su fortuna, estimada en más de 8 000 millones de pesos colombianos (cerca de 1 millón de euros), proviene directamente del entramado de trata de personas.

Las investigaciones siguen abiertas en ambos países con miras a identificar e incautar los activos financieros conectados con el grupo y detener a cualquier otro miembro de la red que no haya sido arrestado aún.

El caso cuenta con el apoyo de INTERPOL en el marco del proyecto Turquesa, una iniciativa conjunta entre INTERPOL y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito financiada por el Ministerio de Asuntos Mundiales de Canadá.