Proyecto Sharaka

Lucha contra el terrorismo en Próximo Oriente y el Norte de África

La primera línea de defensa para prevenir los desplazamientos de terroristas es disponer de una buena seguridad fronteriza.

El proyecto Sharaka, financiado por la Unión Europea, hace llegar las herramientas y conocimientos policiales de INTERPOL a los funcionarios de primera línea de ocho países: Argelia, Egipto, Jordania, Líbano, Libia, Marruecos, Palestina y Túnez.

Su objetivo es ayudar a estos países a detectar e interceptar a terroristas y grupos terroristas utilizando la tecnología, desarrollando capacidades y realizando operaciones policiales.

Impedir que los terroristas crucen fronteras

El proyecto Sharaka conecta a organismos de primera línea al sistema I-24/7 (la red mundial de comunicación policial protegida de INTERPOL), principalmente en aeropuertos, puertos marítimos y fronteras nacionales, lo que les permite intercambiar información policial en tiempo real y acceder a nuestras distintas bases de datos de alcance mundial.

Es fundamental que los funcionarios de seguridad fronteriza dispongan de acceso directo a la base de datos de INTERPOL sobre documentos de viaje robados y perdidos pues los terroristas, y particularmente los combatientes terroristas extranjeros que retornan de zonas de conflicto, utilizan este tipo de documentos en sus desplazamientos.

El proyecto brinda a los países seleccionados los conocimientos, las competencias y los equipos necesarios para luchar contra el terrorismo. Los agentes de primera línea reciben formación sobre el uso de las diferentes bases de datos mundiales de INTERPOL durante investigaciones y operaciones a nivel regional.

Caso concreto: operación en un puerto de Libia

En octubre de 2020 las autoridades libias llevaron a cabo una operación en el puerto marítimo de Khoms que puso de manifiesto el apoyo práctico que se puede prestar con el proyecto Sharaka a los países participantes.

La operación, dirigida por la Oficina Central Nacional (OCN) de INTERPOL en Trípoli en colaboración con los servicios aduaneros y policiales y otros organismos encargados de la seguridad, permitió potenciar el intercambio constante de información y ampliar el acceso a las bases de datos de INTERPOL.

El equipo encargado del proyecto Sharaka prestó apoyo operativo y técnico a distancia a la OCN de Trípoli, y facilitó equipos para la conexión móvil a las bases de datos de INTERPOL y dispositivos de datos biométricos para tomar huellas dactilares.

Más de 30 policías libios fueron movilizados para efectuar controles de personas y pasaportes, recoger huellas dactilares e imágenes faciales de sospechosos tripulantes de barcos e inspeccionar navíos, vehículos y cargueros. A lo largo de dos días, los agentes realizaron más de 400 consultas en las bases de datos de INTERPOL e interceptaron dos contenedores que contenían sustancias ilegales.

Agentes libios consultan las bases de datos de INTERPOL.
Agentes libios consultan las bases de datos de INTERPOL.

Generar información policial regional

Las investigaciones sobre el terreno se basan en una información policial estratégica desarrollada de manera colectiva por los países participantes. De esta forma, los países pueden identificar las pautas de funcionamiento de las redes delictivas y terroristas, detectar nuevas amenazas y enviar alertas rápidas a toda la región.

El proyecto Sharaka de INTERPOL está financiado por la Unión Europea. No debe considerarse en modo alguno que la información aquí presentada recoge la opinión oficial de la Unión Europea.

Project Sharaka Visual