LYON (Francia) - Una operación antiterrorista internacional efectuada en África Oriental se ha saldado con la detención de 37 sospechosos y la incautación de armas, tanto pequeñas como pesadas. Entre los detenidos figuran presuntos miembros del Estado Islámico y de Al Shabaab, así como varios combatientes terroristas extranjeros.
Las detenciones, practicadas en ocho países de África Oriental, tuvieron lugar en el marco de una operación conjunta entre INTERPOL y AFRIPOL llevada a cabo entre noviembre y diciembre de 2024 y destinada a identificar y detener a sospechosos vinculados con el terrorismo y a reforzar controles fronterizos clave.
En Kenia, la policía detuvo a 17 personas, entre ellos dos supuestos miembros del Estado Islámico, varios combatientes terroristas extranjeros y otras personas implicadas en la financiación del terrorismo, la radicalización y la propaganda conexa.
La policía de la República Democrática del Congo detuvo a cuatro presuntos miembros de las Fuerzas Democráticas Aliadas (FDA) y dos cómplices, y aprehendió y destruyó un misil y un dispositivo antitanques abandonados por los sospechosos.
En Somalia, los organismos encargados de la aplicación de la ley detuvieron a tres personas, una de las cuales era un presunto fabricante de bombas que trabajaba para la unidad de inteligencia de Al Shabaab, denominada «Amniyaat», y había estado colocando artefactos explosivos improvisados dirigidos contra las fuerzas del orden y el ejército. Otro de los detenidos era un agente de Al Shabaab que presuntamente había atacado varios controles policiales con granadas de mano.
Las fuerzas del orden de Tanzania detuvieron a un presunto miembro de la sección mozambiqueña del Estado Islámico, así como a un ciudadano ugandés que intentaba unirse a un grupo terrorista en Mozambique en calidad de combatiente terrorista extranjero.
Antes de la operación, cada país participante preparó un plan operativo, recopilando información policial sobre objetivos relacionados con actividades terroristas, entre los que figuraban una serie de personas y sus paraderos conocidos. INTERPOL y AFRIPOL consolidaron y analizaron dicha información, y la transmitieron a todos los países participantes, lo cual facilitó el intercambio de cuantiosa información policial.
Durante la fase táctica de la operación, cada país realizó investigaciones estratégicas y practicó redadas. La policía recibió apoyo sobre el terreno de funcionarios de INTERPOL y AFRIPOL, que llevaron a cabo labores de coordinación, logística y análisis de datos en tiempo real.
Cyril Gout, director ejecutivo (en funciones) de Servicios Policiales de INTERPOL, declaró:
«El complejo panorama de África Oriental, marcado por la inestabilidad política, la permeabilidad de sus fronteras y los desafíos socioeconómicos, sigue creando un entorno propicio a la actividad terrorista. Dado que los grupos terroristas pretenden expandir su alcance más allá de sus tradicionales zonas de influencia, es esencial que los organismos encargados de la aplicación de la ley trabajen juntos para adelantarse a estas amenazas en continua evolución. Los logros obtenidos demuestran la importancia de la colaboración internacional en la lucha antiterrorista».
En palabras de Jalel Chelba, director ejecutivo (en funciones) de AFRIPOL:
«La lucha contra el terrorismo y la delincuencia organizada requiere una estrategia común y pensar con visión de futuro para abordar tanto los riesgos inmediatos como las vulnerabilidades más profundas que hacen posibles tales fenómenos. Esta operación subraya el papel crucial de la cooperación internacional y el intercambio de información policial en la neutralización de las redes delictivas y la limitación de su alcance. AFRIPOL está determinada a apoyar a sus países miembros, a mejorar las alianzas regionales y a fomentar la resiliencia para promover una seguridad y una estabilidad duraderas en todo el continente africano».
La seguridad de las fronteras: una línea de defensa fundamental contra el terrorismo
Con el objeto de reforzar la seguridad en las fronteras, los policías de primera línea que trabajan en los puestos de control fronterizo terrestres, aéreos y marítimos recibieron formación para la utilización de los dispositivos móviles de INTERPOL y se les suministraron dichos equipos, que les proporcionaban acceso en tiempo real a las bases de datos de INTERPOL. Estas contienen información personal y sobre antecedentes penales, además de otros datos, de aproximadamente 135 000 combatientes terroristas extranjeros, así como millones de registros sobre documentos de viajes perdidos o robados, documentos que constituyen una ventaja fundamental para los desplazamientos de los terroristas.
Durante los cinco días que duró la operación centrada en la seguridad fronteriza, se llevaron a cabo en las bases de datos de INTERPOL más de 88 000 comprobaciones que condujeron a la detección de 15 personas objeto de notificaciones y difusiones de INTERPOL por delitos tales como la estafa, la violación, el asesinato, el robo a mano armada, el blanqueo de capitales y los delitos contra menores. En total, la intensificación de los controles fronterizos dio lugar a 32 detenciones por una amplia variedad de delitos.
El éxito de la cooperación entre los ocho países participantes, INTERPOL y AFRIPOL muestra la importancia de un enfoque integral para la lucha contra el terrorismo, que continúa siendo una grave amenaza para la seguridad en la región.
Programa de INTERPOL de apoyo a la Unión Africana en relación con AFRIPOL (ISPA), financiado por el Ministerio Federal de Asuntos Exteriores de Alemania y destinado a prestar apoyo a AFRIPOL a fin de reforzar su posición como institución líder en África para prevenir y combatir la delincuencia organizada transnacional, el terrorismo y la ciberdelincuencia.
Países participantes: Kenia, Mozambique, República Democrática del Congo, Somalia, Sudáfrica, Tanzania, Uganda y Yibuti.