LYON (Francia) – Bélgica ha promulgado una nueva ley que aumentará considerablemente su capacidad de resolver casos sobre personas desaparecidas o cadáveres sin identificar.
Hasta ahora, al investigar desapariciones sospechosas de personas, la policía belga no podía compartir libremente sus perfiles de ADN en las bases de datos internacionales, lo que limitaba su capacidad para encontrar respuestas en el extranjero.
La nueva ley permite de forma explícita que los perfiles de ADN obtenidos en Bélgica se busquen y almacenen en las bases de datos de ADN e I-Familia de INTERPOL cuando se trate de personas desaparecidas, familiares de personas desaparecidas o restos humanos no identificados. Permitirá asimismo hacer búsquedas más sistemáticas, añadiéndoles nuevas probabilidades de cooperación, y garantizará que se exploren todas las vías posibles.
Peter De Buysscher, director de Cooperación Policial Internacional de la Policía de Bélgica y vicepresidente del Comité Ejecutivo de INTERPOL, muy complacido con la promulgación de esta nueva ley, añadió: "Las leyes nacionales sobre el ADN se pueden y se deben enmendar. Es una etapa inevitable de la innovación y de la globalización. Esta modificación de la ley aportará una dimensión global a las investigaciones nacionales".
Ahora que las nuevas conexiones a la base de datos están disponibles a través del sistema I-24/7, el sistema de comunicación policial protegida de INTERPOL, la Oficina Central Nacional de Bélgica y la Secretaría General están comenzando a compartir más datos.
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