SINGAPUR - Más de dos años después de que, durante una operación de INTERPOL, se controlara a una ucraniana en el aeropuerto Suvarnabhumi de Bangkok (Tailandia) y se hallaran 116 crías de tortuga en su equipaje, los ejemplares de estas especies protegidas internacionalmente han sido devueltos a Tanzania para su utilización como pruebas contra la traficante.
La repatriación de las tortugas marca la fase final de una larga investigación centrada en esta red internacional de tráfico de especies silvestres que se ha saldado con la detención de 14 sospechosos de distintos países y la localización de la traficante ucraniana tras una investigación a escala mundial.
Ayer tuvo lugar en Bangkok una ceremonia de entrega para celebrar la devolución de los reptiles a la que asistieron altos mandos de Tailandia y Tanzania.
Surapan Thaiprasert, comandante de la División de Asuntos Exteriores de la Policía Real de Tailandia, declaró:
«Tailandia ha trabajado codo con codo con INTERPOL y nuestros socios en Tanzania en este caso tan destacado. Nuestra notable capacidad de detección nos permitió interceptar a la traficante y rescatar a las tortugas. Su devolución a Tanzania muestra la colaboración que hemos mantenido».
Ganancias de origen delictivo
El tráfico de tortugas en peligro genera importantes ganancias de origen delictivo, para lo que se retira a las especies de sus hábitats naturales y, a continuación, se venden como mascotas exóticas, a menudo en el extranjero.
Los 116 especímenes recuperados en Bangkok incluían tortugas de cuña, radiadas y gigantes de Aldabra, todas ellas especies protegidas por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
A pesar de los tratamientos de emergencia dispensados por las autoridades tailandesas, muchas de las tortugas murieron después de ser encontradas en el equipaje de la traficante, aunque los 116 ejemplares recuperados se repatriaron para que fueran utilizados como pruebas.
En palabras de Cyril Gout, director ejecutivo (en funciones) de Servicios Policiales de INTERPOL:
«El tráfico de especies silvestres es una grave amenaza mundial que daña los ecosistemas y afecta a las comunidades, a la vez que enriquece a los grupos de delincuencia organizada. Este caso demuestra que las fuerzas del orden a nivel internacional tienen la determinación de proteger las especies vulnerables, detener el tráfico ilegal de especies silvestres y llevar ante la justicia a los autores de estos delitos».
INTERPOL desempeña un papel fundamental al propiciar una actuación coordinada con el fin de hacer frente a los delitos contra la flora y la fauna silvestres, y seguirá asistiendo a sus países miembros para la neutralización de las organizaciones delictivas dedicadas al tráfico de estas especies.
Desarticulación de una red dedicada a los delitos contra las especies silvestres
Tras su detención en Bangkok, la traficante ucraniana huyó de Tailandia antes de que se pudieran llevar a cabo todas las diligencias relacionadas con su procesamiento. Gracias a la intensa cooperación policial internacional mantenida y a la publicación de una notificación roja de INTERPOL, en marzo de 2023 fue localizada en Bulgaria y tres meses después fue extraditada a Tanzania.
Una vez demostrado que la traficante formaba parte de una red más amplia dedicada al tráfico de especies silvestres, INTERPOL proporcionó apoyo operativo y a la investigación. Estos esfuerzos se saldaron con la detención de otros 14 sospechosos, procedentes de Egipto, Indonesia, Madagascar y Tanzania, entre otros países.
Ramadhan Hamisi Kingai, director de Investigaciones Penales de la Policía de Tanzania, indicó:
«Todos los logros, desde la detención de la sospechosa hasta la repatriación de las tortugas, fueron posibles gracias a la sólida cooperación policial internacional y al enfoque interinstitucional y colaborativo fomentado por INTERPOL. Tanzania se ha comprometido firmemente a combatir los delitos contra la flora y la fauna silvestres y sigue trabajando con los demás países para garantizar que sus autores sean detenidos y enjuiciados con todo el rigor de la ley».
Los servicios locales de protección de las especies silvestres de Tanzania pondrán a las tortugas supervivientes en cuarentena y las tratarán, antes de evaluar si es seguro devolverlas a sus hábitats naturales.
El apoyo a las investigaciones que INTERPOL brinda a los países miembros situados en zonas de tráfico de especies silvestres cuenta con financiación de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional y otros donantes.