LYON (Francia) – Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, visitó hoy INTERPOL, la organización policial más grande del mundo, y subrayó el compromiso de su país con la lucha contra la delincuencia organizada transnacional.
La visita supone un firme respaldo de Brasil al cometido de INTERPOL y al papel que desempeña su liderazgo, que resulta esencial para responder a uno de los desafíos más urgentes de nuestro tiempo en materia de seguridad.
Durante la visita del presidente Lula y la delegación brasileña, integrada por Ricardo Lewandowski, ministro de Justicia y Seguridad Pública, Mauro Vieira, ministro de Asuntos Exteriores, Andrei Augusto Passos Rodrigues, director general de la Policía Federal de Brasil, y los ministros de Minería y Energía, y de Ciencia, Tecnología e Innovación, entre otros, también se inauguró oficialmente un nuevo equipo especial de INTERPOL contra la delincuencia organizada en América Latina.
El equipo especial internacional, basado en las oficinas de INTERPOL en América Latina y el Caribe, está destinado a combatir las redes delictivas y el tráfico de drogas en la región y más allá de esta, y se centrará en la neutralización y el desmantelamiento de los grupos de delincuencia organizada transnacional más peligrosos, mediante la captura de algunos de sus miembros que constituyen objetivos de alto valor y el combate de la infraestructura financiera de dichas redes.
La carta de intenciones firmada por Brasil e INTERPOL durante la visita de Estado permitirá un intercambio aún mayor de información, conocimientos especializados y buenas prácticas para la lucha contra la delincuencia, lo que a su vez reforzará la posición de Brasil como líder de la lucha contra todos los tipos de delincuencia
Tras ser recibido por Ahmed Naser Al-Raisi y Valdecy Urquiza, respectivamente presidente y secretario general de INTERPOL, el presidente brasileño fue informado de la labor fundamental que desempeña la Organización al ayudar a los países miembros a proteger a los grupos de población más vulnerables, preservar el medioambiente y desmantelar las redes de delincuencia organizada.
El presidente Lula declaró:
«La elección de Valdecy Urquiza como secretario general de INTERPOL supone un reconocimiento del destacado papel de Brasil en la lucha contra la delincuencia transnacional».
«Esta organización trabaja para localizar y detener a algunos de los delincuentes más peligrosos del planeta, lucha contra el terrorismo, rescata a las víctimas de la trata de personas y la explotación sexual y protege el medioambiente».
«La delincuencia está evolucionando a un ritmo sin precedentes, lo que requiere una actuación multilateral urgente y coordinada».
«Ningún país podrá vencer a la delincuencia transnacional por sí solo».
«Al igual que otros desafíos actuales que requieren una actuación colectiva, tales como el cambio climático y la gobernanza digital, la cooperación policial seguirá siendo una prioridad para la política exterior de Brasil».
El presidente de INTERPOL, Ahmed Naser Al-Raisi, señaló:
«Brasil aporta una notable contribución a la seguridad y a la justicia a escala mundial, apoyando nuestra labor destinada a intensificar la cooperación internacional contra unas amenazas que no conocen fronteras. Cualquiera que sea el fenómeno delictivo al que se enfrente (la delincuencia organizada, la destrucción del medio ambiente, las ciberamenazas o la trata de personas), la Policía Federal de Brasil demuestra en todo momento su profesionalidad, su excelencia operativa y su compromiso mundial. Dicho cuerpo policial desempeña una función esencial para la seguridad internacional, por lo que estamos orgullosos de trabajar con él codo con codo en la primera línea de la lucha contra la delincuencia transnacional».
«La visita del presidente Lula es más que un gesto diplomático; es una enérgica afirmación del compromiso de Brasil con la cooperación internacional y la seguridad colectiva, además de subrayar la confianza, el respeto y la misión común que unen a Brasil y a INTERPOL».
Por su parte, Valdecy Urquiza, secretario general de INTERPOL, indicó:
«Nos enfrentamos a un panorama de la seguridad más volátil que nunca, ya que la delincuencia organizada transnacional alcanza unos niveles sin precedentes, al ser más dinámica, más digital y tener un mayor arraigo más allá de las fronteras».
«Ya no es únicamente una cuestión de seguridad. La delincuencia organizada es un fenómeno mundial que representa una amenaza para la justicia, compromete la resiliencia climática y paraliza el progreso social y económico».
«La amenaza es real y va en aumento, por lo que ya es hora de actuar».
«El acuerdo entre INTERPOL y Brasil envía un mensaje potente: la lucha contra la delincuencia organizada es una de nuestras prioridades principales a escala mundial».
«Es el momento de que otros países sigan el ejemplo de Brasil y consoliden los esfuerzos de INTERPOL. Solo trabajando juntos, mediante la aportación de una respuesta verdaderamente mundial y coordinada a la delincuencia, podremos desmantelar las redes delictivas y garantizar la consecución de un mundo más seguro para todos».
Durante la visita, el presidente Lula otorgó al secretario general la medalla brasileña de la Orden de Río Branco, con el grado de Gran Oficial. La condecoración, creada en 1963, galardona a las personas, tanto brasileñas como extranjeras, que han contribuido de manera significativa a las relaciones internacionales y a la cooperación a escala mundial de Brasil.
