El 8 de enero, un agente de la Oficina Central Nacional (OCN) de INTERPOL en el Perú recibió un mensaje de un homólogo de la OCN de Buenos Aires en el que se solicitaba ayuda para localizar a una joven argentina de 16 años desaparecida de su casa que, según se creía, se encontraba en la capital peruana. La adolescente, JFA por sus iniciales, era objeto de una notificación amarilla de INTERPOL, una alerta policial mundial sobre personas desaparecidas.
En los días que siguieron, el equipo de búsqueda de prófugos de la OCN del Perú trabajó en el caso, intercambiando información de primera importancia con la OCN de Buenos Aires a través de la red de comunicación policial protegida de INTERPOL, denominada I-24/7. El 12 de enero el equipo había seguido el rastro de la joven hasta dos distritos del norte de la ciudad: Los Olivos y San Martín de Porres.
Al día siguiente, el equipo localizó a JFA caminando con una mujer de mayor edad por una céntrica avenida de San Martín de Porres. Varias horas después, agentes de la OCN del Perú y del departamento de explotación laboral de la Policía Nacional entraron en acción, junto con un fiscal provincial, y rescataron a la menor. La mujer que la acompañaba fue detenida y posteriormente acusada de trata de personas.
Rescatada el mismo día
Al día siguiente de que la policía comenzara a actuar para localizar a JFA en el Perú y rescatarla, la OCN del Perú recibió una petición de ayuda en lo que era un segundo caso de desaparición de una adolescente -esta vez, presentada por la división de personas desaparecidas de la Policía Nacional-, una niña peruana de 13 años que respondía a las iniciales MAVN. Se pedía a la OCN del Perú que solicitara la publicación de una notificación amarilla de INTERPOL sobre la menor, que según se creía se encontraba en el extranjero.
La Secretaría General de INTERPOL publicó la notificación amarilla ese mismo día, tras lo cual la OCN del Perú envió un mensaje a través del sistema I-24/7 a las OCN de otros países sudamericanos para informarles de la publicación de la notificación y solicitar su ayuda para localizar a la adolescente.
Pronto llegó una posible pista desde Chile. En una llamada telefónica Maximiliano Macnamara Valderrama, jefe de la OCN de Chile, informó a Carlos Roque Palomino, su homólogo de la OCN del Perú, de que según una información oficiosa MAVN podría encontrarse en un albergue para migrantes venezolanos situado en Iquique (Chile). Roque Palomino pidió a la OCN de Chile que investigara la información y la confirmara.
El 13 de enero, el mismo día en que se localizó a JFA en San Martín de Porres, la OCN del Perú recibió un mensaje de la OCN de Chile en el que solicitaba información biométrica para que la policía chilena pudiera identificar a MAVN. En pocas horas se enviaron fotografías, huellas dactilares y otros datos relacionados con el caso a través del sistema I-24/7, y esa misma noche la OCN de Chile confirmó que MAVN había sido identificada y rescatada. Ahora la niña ha regresado a Perú y se encuentra con su madre.
"La rapidez de la cooperación policial internacional entre los países miembros de INTERPOL es la combinación ideal para rescatar a tiempo a las víctimas de la trata de personas", declaró Carlos Roque Palomino, jefe de la OCN del Perú.
Y añadió: "Gracias a las capacidades de INTERPOL, como las notificaciones amarillas y la red de comunicación protegida I-24/7, podemos garantizar que no será la trata de personas y el tráfico de migrantes a escala internacional lo que impida que los delincuentes sean llevados ante la justicia, y que no será la distancia lo que impida que una persona desaparecida o perdida sea devuelta a su hogar".
"Cada día, las OCN de INTERPOL llevan a cabo una labor policial fundamental que salva vidas, protege a los más vulnerables y hace de forma tangible que el mundo sea más seguro", declaró Stephen Kavanagh, Director Ejecutivo de Servicios Policiales de INTERPOL. "En la Secretaría General de INTERPOL tenemos el deber de seguir garantizando que las herramientas y los servicios que ofrecemos a nuestros países miembros sean lo más pertinentes posible para la misión que tienen".
La unidad de INTERPOL especializada en tráfico de migrantes y trata de personas está tratando estos casos directamente con las OCN pertinentes para proporcionarles más apoyo en sus investigaciones.
Las notificaciones amarillas de INTERPOL se publican para ayudar a localizar a personas desaparecidas, a menudo menores de edad. El año pasado, la Secretaría General de INTERPOL publicó más de 2 500 notificaciones de este tipo.