MARRAKECH (Marruecos)- Los Jefes de Policía de Próximo Oriente y Norte de África, una de las regiones en las que el intercambio de información vía INTERPOL crece con más rapidez, se reúnen para desarrollar una cooperación más firme.
Si bien el terrorismo sigue siendo un tema fundamental, las medidas para luchar contra las amenazas relacionadas con la ciberdelincuencia y la delincuencia organizada, como el tráfico de drogas, también formarán parte de los temas prioritarios del orden del día de la 4ª reunión de Jefes de Policía de Próximo Oriente y Norte de África.
INTERPOL ha coordinado operaciones en la región que han sacado a la luz vínculos entre los diferentes tipos de delincuencia transnacional.
Durante la operación Trigger IV contra las armas de fuego ilícitas, no sólo se pudieron incautar armas que podían estar relacionadas con el lugar de los hechos en Oriente Medio, Europa y América Latina, sino que también se detuvieron a 98 personas relacionadas con el tráfico ilícito de migrantes, de bienes y otros delitos.
Entre los meses de julio y septiembre de este año, la operación Neptune II, encargada de la seguridad de las fronteras marítimas en las rutas entre el Norte de África y el Sur de Europa, identificó a 12 presuntos terroristas.
El Secretario General de INTERPOL, Jürgen Stock, señaló que para hacer frente a los problemas actuales y futuros en materia de seguridad será necesario una cooperación continua a nivel regional y mundial.
“INTERPOL sigue realizando actividades en la región de Próximo Oriente y Norte de África que refuerzan nuestra comprensión colectiva de las amenazas”.
“Asimismo, estamos constatando resultados globales gracias a que las fuerzas del orden nacionales recopilan e intercambian más información entre los países de la región a través de INTERPOL. Cada dato sobre una acción policial contribuye a la eficacia de INTERPOL como sistema mundial de alerta rápida”.
Esta reunión de dos días (25 y 26 de noviembre) reunió a unos 60 altos mandos de organismos encargados de la aplicación de la ley de 17 países, del Consejo de Ministros Árabes de Interior, de la Policía del Consejo de Cooperación del Golfo (GCCPOL) y de la Universidad Árabe Naif de Ciencias de la Seguridad.
En ella participaron los siguientes países: Arabia Saudí, Argelia, Bahréin, Catar, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Irak, Jordania, Kuwait, Libia, Mauritania, Omán, Palestina, Sudán, Túnez y Yemen.