Los países latinoamericanos participan en la primera operación de INTERPOL contra la tala ilícita

19 de febrero de 2013

LYON (Francia) – La primera operación internacional de INTERPOL contra la tala ilícita y los delitos forestales a gran escala se ha saldado con cerca de 200 detenciones y la aprehensión de madera valorada en varios millones de dólares, además del decomiso de unos 150 vehículos en gran parte de América Latina.

La operación LEAD, que tuvo lugar entre el 17 de septiembre y el 17 de noviembre de 2012, se llevó a cabo en doce países de América Central y del Sur bajo los auspicios del Programa de INTERPOL sobre Delitos contra el Medio Ambiente y su proyecto LEAF. Esta actuación reunió a organismos encargados de la aplicación de la ley en materia forestal de Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Honduras, Paraguay, Perú, República Dominicana y Venezuela.

En el marco de la operación, los funcionarios de las fuerzas del orden inspeccionaron e investigaron personas, locales de venta al por menor y vehículos de transporte, y efectuaron además labores de vigilancia y control en distintos centros de transporte.

De este modo lograron decomisar troncos y productos de madera que según se calcula podrían ascender a más de 50.000 m3, lo que equivale a la carga de unos 2.000 camiones, y tener un valor total de unos 8 millones de dólares estadounidenses.

Además, los países participantes notificaron la detención de 194 personas, de las cuales 118 están siendo investigadas y varias han sido objeto de expulsión.

Uno de los principales objetivos de la operación consistía en el desarrollo de la comunicación y la cooperación práctica tanto entre los organismos encargados de la aplicación de la ley en materia de medio ambiente, lo que incluye a las agencias forestales, la policía, las aduanas y las unidades especializadas, como con organizaciones internacionales tales como INTERPOL.

“La operación LEAD marca el inicio de la labor de ayuda de INTERPOL a sus países miembros en la lucha contra la tala ilícita y los delitos forestales, que no solo ponen en peligro la salud, la seguridad y la calidad de vida de las comunidades nativas dependientes de los bosques, sino que además ocasionan grandes pérdidas económicas a los Estados”, declaró David Higgins, jefe del Programa de INTERPOL sobre Delitos contra el Medio Ambiente. “Es un objetivo importante para el proyecto LEAF, ya que permite combatir el tráfico ilícito de madera, que según se calcula reporta cada año entre 30.000 y
100.000 millones de dólares estadounidenses”.

“La información policial recopilada durante esta primera fase de la operación servirá a INTERPOL para adoptar medidas más incisivas contra la tala ilícita, en colaboración con sus países miembros. Nuestra organización seguirá prestando apoyo a los países para que introduzcan mejoras sostenibles a largo plazo en la lucha de sus fuerzas del orden contra una desforestación ilegal e insostenible”, añadió Davyth Stewart, funcionario policial especializado de INTERPOL y jefe de equipo del proyecto LEAF.

El proyecto LEAF es una iniciativa conjunta dirigida por INTERPOL, que cuenta con la participación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y el apoyo financiero de la agencia noruega de cooperación para el desarrollo. Con él se presta asistencia a los países para combatir la tala ilícita y los delitos forestales que socavan los esfuerzos por aplicar normas nacionales e internacionales sobre protección forestal y prácticas sostenibles en este ámbito.

La naturaleza transnacional de la tala ilícita supone un problema para los organismos reguladores y encargados de la aplicación de la ley, que a menudo ven restringida su capacidad de trabajo fuera de sus territorios nacionales. El proyecto LEAF tiene por objeto prestar ayuda a las fuerzas del orden de distintos países en la coordinación de una respuesta mundial de las fuerzas del orden.