La Asamblea General de INTERPOL congrega en Roma a dirigentes de todo el mundo para luchar contra la violencia actual

5 de noviembre de 2012

ROMA (Italia) – En la mayor reunión de este tipo organizada hasta el momento, INTERPOL ha congregado a cerca de cien ministros de Justicia, Interior y Seguridad de todo el planeta para debatir sobre la violencia criminal que se manifiesta en todo tipo de delitos, desde la trata de personas hasta el terrorismo.

La reunión ministerial inaugurada hoy marca el inicio de la 81a reunión de la Asamblea General de INTERPOL -que durará cuatro días (del 5 al 8 de noviembre) y tendrá por lema "Retos policiales frente a la violencia de los delitos del mundo actual”-, y servirá de foro de deliberación a más de mil delegados de cerca de 170 países para determinar estrategias viables que permitan prevenir, reprimir y afrontar con eficacia las formas cambiantes de la violencia de los delitos del mundo actual.

Los ministros examinarán cuestiones tan esenciales, como los factores que han conducido a la expansión y agravación de la violencia aparejada a la comisión de delitos, las competencias y estrategias que mejor podrían preparar a sus países para combatir estas formas de  delincuencia, la adecuada adaptación de los marcos jurídicos actuales a las necesidades de las fuerzas del orden y qué alianzas o iniciativas de cooperación pueden ser de utilidad para hacer frente de forma sostenible a la violencia de los delitos en el mundo actual.

En su discurso inaugural, la Ministra italiana del Interior, Annamaria Cancellieri, declaró que la lucha contra la delincuencia es un asunto muy complejo en el que los Estados están limitados por las leyes nacionales, y los delincuentes no.

“Los delitos pueden desbordar las fronteras de los países y sus autores pueden encontrar el modo de no caer en manos de las fuerzas del orden: por esta razón se necesita la cooperación internacional. En este contexto, INTERPOL, motor incansable de cooperación policial internacional, es el único medio para defender a los ciudadanos de la amenaza delictiva, a la que los países no pueden hacer frente por sí solos”, indicó la oradora.

Con este fin la ministra italiana ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que ayude a "reforzar" la cooperación policial internacional y a apoyar a INTERPOL en la ampliación de sus operaciones de modo que todos los policías tengan acceso a sus servicios mundiales para luchar contra la delincuencia transnacional.

El Presidente de INTERPOL, Khoo Boon Hui, afirmó que la reunión ministerial ofrecerá una plataforma para una mayor cooperación a escala mundial que permitirá actuar contra la violencia de los delitos transnacionales, en estos momentos en que esta se está expandiendo y sacando provecho de las últimas novedades tecnológicas y de la inestabilidad económica.

"En un mundo en que las fronteras pueden ser el arma más poderosa en manos de los delincuentes, los países de todo el globo se deciden ahora a cooperar a través de diversos continentes y distintas lenguas y culturas para reconocer y combatir mejor las amenazas que se ciernen sobre la seguridad”, declaró Khoo Boon Hui.

El Secretario General de INTERPOL, Ronald K. Noble, habló de las dificultades operativas ocasionadas por la violencia actual que experimentan muchos países miembros de la organización que dirige.

“Nuestras estrategias han evolucionado muchísimo con el tiempo, pero los retos que tenemos hoy frente a nosotros siguen siendo inmensos, porque la violencia criminal cambia constantemente de forma. El carácter cambiante de esta violencia se ve agravado por el hecho de que un acto de extremada violencia cometido un día en un país puede repercutir rápida y fácilmente en otros países: la violencia se extiende como la pólvora”, declaró Ronald Noble.

En la reunión ministerial se afirmó que la intensidad, la velocidad y la frecuencia de la violencia delictiva actual en todo el mundo "no tiene precedentes", y que la violencia mortífera acaba cada año con la vida de unas 500.000 personas: nueve de cada diez de ellas son víctimas de la delincuencia y del terrorismo, no de los conflictos armados.

“Esta violencia no se puede contener con medios tradicionales, y con ella hemos entrado en una nueva era. Ha llegado el momento de compartir experiencias e ideas para hacer frente a estas nuevas dificultades con miras a repeler o reducir la violencia delictiva en nuestros países miembros”, señaló el jefe de INTERPOL.

“Compartiremos las experiencias y los análisis de los participantes con todos y cada uno de nuestros 190 países miembros y sus cuerpos policiales. Sabemos que la policía tiene un papel importante en las soluciones que ustedes propongan. Por su parte, INTERPOL creará nuevas herramientas y nuevos servicios para ayudar sobre el terreno, día y noche, a los servicios policiales y las fuerzas del orden de sus países.”

“Trabajaremos con ustedes para mejorar las capacidades de los organismos encargados de la aplicación de la ley ofreciéndoles formación y reforzando sus infraestructuras a fin de velar por que estén siempre interconectados entre sí en tiempo real, así como para garantizar que cuando la violencia delictiva se haga sentir o amenace a los ciudadanos de sus países, las fuerzas del orden no estén solas para hacerle frente”, indicó el Secretario General de INTERPOL a los ministros.

Al término de la reunión, que durará un día, se hará pública una declaración ministerial en la que se presentará una línea de conducta, que podrá adaptarse a los problemas de seguridad específicos de cada ciudad, nación y región, y que se verá respaldada por un mayor intercambio de información y una más amplia utilización de las herramientas y los servicios mundiales de INTERPOL.