La colaboración internacional, clave para la detención de pederastas en Portugal

23 de enero de 2020
Investigaron durante un año el sitio web “Babyheart”, alojado en la red oscura, y a su administrador, “Twinkle”.

Lyon (Francia) – La Policía Judicial portuguesa ha dado hoy una rueda de prensa en la que ha revelado cómo la cooperación internacional ha propiciado la detención de dos hombres que abusaban sexualmente de menores.

La rueda de prensa, organizada en la sede de la Policía Judicial portuguesa en Lisboa, ha contado con la presencia de INTERPOL, Europol y el ICE ─el servicio de inmigración y aduanas de Estados Unidos─, que han desempeñado un importante papel en las actuaciones que llevaron a la captura de los delincuentes en 2017.

Con estas actuaciones concluye la investigación de un año del sitio web de la red oscura dedicado al abuso de menores, “Babyheart”, y de su administrador, “Twinkle”, en la que han intervenido distintos organismos policiales de todo el mundo.

Así, investigadores procedentes, entre otros organismos, del ICE (Estados Unidos), el Bunderskriminalamt (Austria), la Gendarmerie (Francia), la Polizia di Communicazioni (Italia), la National Crime Agency y la West Midlands Police (Reino Unido), la Policía Federal y el Equipo Argos de la Policía de Queensland (Australia), los Servicios Policiales de Toronto (Canadá) y la Policía Federal brasileña colaboraron entre ellos y utilizaron los sistemas de intercambio de información protegidos puestos a su disposición por INTERPOL y Europol para recabar la información necesaria.

Gracias a esta información averiguaron que el usuario “Twinkle” era el administrador del sitio web “Babyheart”, alojado en la red oscura, en el que colgaba las fotografías de los abusos sexuales a los que había sometido a los menores.  No obstante, mantenía su anonimato gracias a la red Tor, a fin de evitar ser identificado por los investigadores.

El administrador afirmó haber utilizado métodos avanzados de encriptación y contravigilancia para pasar desapercibido y eludir la persecución de las fuerzas policiales. Así, apenas daba información sobre su verdadera identidad y ponía datos falsos en las publicaciones y mensajes en línea y en el material relacionado con abusos sexuales a menores que afirmaba haber producido, para que a los investigadores les resultara más complicado identificarlo.

El estudio pormenorizado de la información facilitada por los organismos de la aplicación de la ley participantes, que abarcaba también fotografías y vídeos, permitió realizar importantes averiguaciones y delimitar a continuación la zona de búsqueda del sospechoso a Portugal.

En ese momento, la Policía Judicial portuguesa tomó el mando de la investigación y comenzó a trabajar con la Fiscalía. Posteriormente, los especialistas de INTERPOL, Europol y el ICE analizaron la información policial y descubrieron nuevos datos relevantes sobre el sospechoso y las víctimas de las que presuntamente abusaba.

Esta colaboración fue clave para la detención y acusación del sospechoso. Los agentes se incautaron de sus dispositivos electrónicos, que luego examinaron, lo que llevó a la identificación de siete víctimas directamente relacionadas con él.

“Para este caso fueron necesarios el apoyo y las aportaciones de tantas partes interesadas... Es un ejemplo de manual sobre cómo el hecho de colaborar a escala internacional conduce a meter entre rejas a personas peligrosas. Queremos aprovechar esta experiencia para proteger a más niños de los abusos sexuales”, ha declarado Valdecy Urquiza, Subdirector de la Unidad de INTERPOL de Grupos Vulnerables.