Lanzamiento de una iniciativa mundial para hacer frente a la destrucción y el tráfico de bienes culturales por parte de terroristas y grupos delictivos organizados

27 de septiembre de 2015

NACIONES UNIDAS, Nueva York – En paralelo a la celebración de la 70ª reunión de la Asamblea General de la ONU, se ha lanzado una nueva iniciativa internacional para mejorar la protección del patrimonio cultural, objetivo de terroristas y personas dedicadas al tráfico ilícito.

La iniciativa “Protección del patrimonio cultural: un imperativo para la humanidad” fue presentada por los Ministros de Asuntos Exteriores de Italia y Jordania, con la participación de dirigentes de la UNESCO, INTERPOL y la ONUDD, así como de ministros de varios Estados miembros de la ONU.

El principal objetivo del programa es hacer un seguimiento de las resoluciones y decisiones adoptadas por el Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU, así como por otros organismos internacionales.

En los últimos diez años el mundo ha sido testigo de un fuerte aumento de los atentados terroristas contra el patrimonio cultural de países afectados por conflictos armados y de la destrucción de este, así como del saqueo organizado, el tráfico ilícito y la venta de bienes culturales, que han alcanzado unos niveles sin precedentes.

Estas actuaciones forman parte de la táctica de guerra aplicada por los grupos terroristas para intimidar a las poblaciones y a los gobiernos. Además, contribuyen a generar ingresos para los grupos terroristas de Próximo Oriente y de otras regiones, ingresos que posteriormente se utilizan para financiar procesos de reclutamiento y actividades operativas.

Ante el foro de colaboradores decididos a mejorar la protección del patrimonio cultural, Paolo Gentiloni, Ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación Internacional de Italia, declaró: “El patrimonio cultural es el reflejo de la historia de la humanidad, la civilización y la coexistencia de numerosos pueblos y modos de vida. Toda la comunidad internacional es responsable de su protección, para beneficio de las generaciones futuras.”

“El patrimonio cultural y religioso de Próximo Oriente, lugar donde nacieron la civilización y las religiones, pertenece a toda la humanidad”, señaló Nasser Judeh, Viceprimer Ministro y Ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, quien hizo un llamamiento a todos los altos cargos participantes para que “protejan y preserven este patrimonio, ya que es una responsabilidad compartida por toda la comunidad internacional”.

Tras solicitar un mayor compromiso político, Irina Bokova, Directora General de la UNESCO declaró: “La cultura se encuentra en la primera línea de los conflictos; debería estar también en la primera línea de la consolidación de la paz”.

Mireille Ballestrazzi, Presidenta de INTERPOL, la organización policial más grande del mundo, hizo hincapié en la necesidad de “unir nuestros esfuerzos y recursos para frenar eficazmente este fenómeno delictivo y proteger el patrimonio cultural mundial para las generaciones futuras”.

El Director Ejecutivo de la ONUDD, Yury Fedotov, destacó la importancia de aunar esfuerzos para abordar el problema del tráfico y la destrucción de bienes culturales, puesto que se trata de “delitos contra la esencia misma de nuestra civilización y nuestro patrimonio”.

El lanzamiento de esta iniciativa se produce solo un día después de que la Corte Penal Internacional anunciase la entrega y traslado por parte de las autoridades de Níger del principal sospechoso de la investigación de Malí: “Los ataques intencionados contra monumentos históricos y edificios consagrados a la religión se consideran delitos graves”.

Ahmad Al Faqi Al Mahdi, también conocido como “Abou Tourab” –miembro del autoproclamado grupo armado “Ansar Dine”— está acusado de la presunta comisión de un crimen de guerra consistente en la perpetración de ataques intencionados contra diez construcciones religiosas y monumentos históricos de la antigua ciudad de Tombuctú.

La presente iniciativa de protección del patrimonio cultural es un proyecto en el que pueden participar todos los Estados miembros, organizaciones internacionales y colaboradores que deseen contribuir a proteger los bienes culturales de la destrucción o del tráfico ilícito.

A fin de aumentar la concienciación y multiplicar las actuaciones contra esta amenaza, se ha iniciado también una campaña en las redes sociales, bajo la etiqueta #ProtectHeritage, en la que le invitamos a participar.