INTERPOL coordina una operación contra el tráfico ilegal de medicamentos obtenidos de la flora y fauna silvestres

5 de marzo de 2010

LYON (Francia) - Una operación policial internacional coordinada por INTERPOL contra el tráfico ilícito de medicamentos que contienen productos obtenidos de especies protegidas de flora y fauna silvestres ha dado lugar a varias detenciones y al decomiso de miles de fármacos ilegales por un valor de más de 10 millones de euros.

Las autoridades nacionales encargadas de la protección de la flora y la fauna silvestres, la policía, los servicios aduaneros y las unidades especializadas de 18 países de los cinco continentes han colaborado en la operación TRAM que se llevó a cabo del 1 al 28 de febrero.

Durante el transcurso de esta operación de un mes, las investigaciones sobre personas y sociedades, así como las inspecciones de instalaciones como puertos y almacenes de mayoristas revelaron que un gran número de medicamentos contenían, o se vendían diciendo que contenían, ingredientes ilegales como tigre, oso o rinoceronte.

“Un objetivo primordial de la operación TRAM era combatir el tráfico ilegal de especies de flora y fauna silvestres en peligro de extinción, delito que constituye una amenaza contra la biodiversidad de nuestro planeta. Esta operación demuestra la entrega de INTERPOL y de sus países miembros en la lucha contra este tipo de delitos,” declaró David Higgins, Jefe del Programa de INTERPOL sobre Delitos contra el Medio Ambiente.

“Esta operación demuestra de nuevo que si los autores de delitos contra el medio ambiente pueden atravesar fronteras y hacer gala de un alto nivel de organización, también puede hacer lo mismo la comunidad policial internacional con el fin de detenerlos”.

“El éxito de esta operación no habría sido posible sin la estrecha cooperación y la dedicación de la policía, los servicios de aduanas y los encargados de la aplicación de la ley en materia de flora y fauna silvestres, así como de las unidades especializadas de los 18 países participantes”, añadió Higgins.

La operación, coordinada por el Programa de INTERPOL sobre Delitos contra el Medio Ambiente, con una importante ayuda de la National Wildlife Crime Unit (NWCU) del Reino Unido, se llevó a cabo con objeto de combatir el creciente uso de productos procedentes de especies de fauna y flora silvestres protegidas o en peligro de extinción en la medicina tradicional de todo el mundo. 

“La comunidad de organismos encargados de la aplicación de la ley reconoce el importante valor cultural, histórico y religioso de la medicina tradicional,” declaró Richard Crompton, Chief Constable y representante de la  Association of Chief Police Officers en la NWCU del Reino Unido, “Sin embargo, no se puede tolerar el aumento del uso de especies en peligro de extinción para elaborar medicinas, puesto que ello supone una amenaza inminente para la supervivencia y la existencia de dichas especies.”

En la operación TRAM han colaborado Australia, Canadá, Ecuador, Eslovaquia, Francia, Georgia, India, Italia, Nigeria, Noruega, Nueva Zelanda, Portugal, Reino Unido, República Checa, Serbia, Sudáfrica, Turquía y Zimbabue.

Las investigaciones continúan y los resultados finales se harán publicos una vez concluida la operación.  Quienes deseen más información sobre las actividades que se llevan a cabo a escala nacional, deberán ponerse en contacto con los organismos encargados de la aplicación de la ley del país en cuestión.