El jefe de INTERPOL se reunirá con funcionarios iraníes y argentinos para impulsar la cooperación sobre la investigación del atentado terrorista contra la AMIA

14 de septiembre de 2009

LYON (Francia) – El Secretario General de INTERPOL, Ronald K. Noble, se entrevistará por separado con funcionarios de Irán y de Argentina con miras a facilitar un diálogo directo entre estos países a propósito del atentado terrorista de 1994 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) de Buenos Aires, que causó 85 muertos y cientos de heridos. Tanto el fiscal de Argentina como Irán han animado al Secretario General a actuar como mediador diplomático en un intento por ayudar a ambas partes para que cooperen en este asunto.

El Secretario General se desplazará hasta Teherán (Irán) esta semana y a continuación se reunirá con una delegación argentina en la sede de la Secretaría General, sita en Lyon (Francia), tras la próxima reunión de la Asamblea General.

El 7 de noviembre de 2007 el órgano rector supremo de INTERPOL, la Asamblea General, aprobó la publicación de notificaciones rojas (también conocidas como notificaciones sobre personas buscadas a escala internacional) solicitada por la Oficina Central Nacional (OCN) de Argentina sobre seis sujetos buscados por este país en relación con los atentados contra la AMIA. Uno de estos sujetos es el recién nombrado Ministro de Defensa de Irán, Ahmad Vahidi. Por eso resulta aún más oportuna la labor que realiza el Secretario General para salvar las diferencias entre Irán y Argentina en lo que se refiere a la cooperación en la investigación de los atentados contra la AMIA.

“Tanto Irán como Argentina son miembros apreciados de INTERPOL y comparten numerosos intereses relativos a la labor que llevamos a cabo a escala mundial para combatir el terrorismo y otros delitos internacionales graves”, declaró el
Sr. Noble.

“Nuestra Asamblea General ya ha decidido que la solicitud de Argentina para que INTERPOL procure la detención de las seis personas buscadas es conforme con nuestro Estatuto. No obstante, esta decisión no afecta a la presunción de inocencia de que debe gozar toda persona acusada de un delito, sea este cual fuere. El objetivo de INTERPOL es por tanto ayudar a salir del punto muerto en lo que respecta a la cooperación y hallar el modo tanto de que se obtengan pruebas como de que la investigación del atentado terrorista contra la AMIA y el enjuiciamiento de sus autores sigan adelante”, añadió el Sr. Noble.

Ningún país miembro de INTERPOL está obligado a detener a personas que sean objeto de una notificación roja, pero varios de ellos le otorgan un valor jurídico que permite la detención provisional de una persona. Algunos países miembros no permiten la extradición de sus ciudadanos a otro país por un motivo cualquiera, pero si se presentan pruebas suficientes para acusar y condenar a una persona esta puede ser enjuiciada en el sistema judicial de su propio país.

A menudo el Secretario General ha actuado como mediador diplomático, de forma transparente, cuando los litigios entre los países miembros afectan al logro del cometido de INTERPOL, que es la mejora de la cooperación policial internacional.. Recientemente, sus visitas a India y a Pakistán tras los atentados terroristas de Bombay lograron acrecentar la confianza de ambos países con respecto a la utilidad de las notificaciones rojas y los servicios de INTERPOL para perseguir a los delincuentes.

Los casos que dan lugar a problemas o litigios sobre la publicación de notificaciones rojas son muy excepcionales y no constituyen en modo alguno la norma. El año pasado se publicaron 3.126 notificaciones rojas sin que ello suscitara ninguna polémica. 

“La fuerza de INTERPOL reside en que cuando se plantean diferencias entre nuestros países miembros estamos decididos a alcanzar una solución, a la vez que mantenemos la neutralidad y centramos nuestro planteamiento en la mejora de la cooperación internacional por parte de la policía y las autoridades encargadas de la aplicación de la ley”, concluyó el Secretario General.