La Conferencia Regional Asiática de INTERPOL reconoce la importancia esencial de los instrumentos de INTERPOL para propiciar nuevos éxitos a escala regional

7 de marzo de 2008

Hong Kong (China) – En el momento de su clausura, el viernes pasado, la 20a Conferencia Regional Asiática de INTERPOL lanzó un llamamiento para que se incrementaran las acciones a escala regional y se hiciera mayor uso de los instrumentos y servicios de INTERPOL, con miras a combatir la delincuencia transnacional, incluidos el terrorismo y el turismo sexual infantil.

Los delegados, procedentes de 32 países de toda Asia, el Pacífico Sur y Oriente Próximo, recomendaron que los países miembros de INTERPOL emprendieran operaciones de ámbito regional e hicieran un uso más eficaz de las notificaciones y las bases de datos de INTERPOL, especialmente en la esfera de las actividades destinadas a la localización y captura de los autores de delitos sexuales contra los niños, ya sea en su país de origen o en el país en el que han cometido los delitos.

Tales propuestas formaron parte de la serie de recomendaciones aprobadas por los delegados en la reunión, en la que se trataron cuestiones de fundamental importancia relacionadas con la labor policial en la región. Dichas recomendaciones se formularon pocas horas después de que hiciera pública la noticia de la detención en Tailandia de un famoso presunto traficante de armas, Viktor Bout, que es objeto de una notificación roja de INTERPOL.

“Los delitos que trascienden las fronteras nacionales requieren acciones y soluciones que sólo son posibles si se actúa a escala institucional y transnacional, en lugar de limitarse al ámbito del propio país,” declaró Khoo Boon Hui, Vicepresidente de INTERPOL por Asia y Presidente de la Conferencia.

“La función de INTERPOL consiste en velar por que la cooperación internacional entre los organismos encargados de la aplicación de la ley se traduzca en medidas efectivas sobre el terreno”, agregó el Sr. Khoo.

Los participantes en la Conferencia –organizada en la sede central de la policía de Hong Kong por INTERPOL Hong Kong (China), en su condición de Suboficina de la Oficina Central Nacional (OCN) de INTERPOL en China– pidieron a las OCN de la región asiática que animaran a los organismos encargados de la aplicación de la ley de sus respectivos países a consultar y actualizar periódicamente las bases de datos de INTERPOL y a ampliar su ámbito de utilización hasta la policía de fronteras, las unidades encargadas de las investigaciones y los servicios de aduanas y de inteligencia.

“Uno de los principales puntos fuertes de INTERPOL es que se trata de una organización en la que se valora y respeta el conocimiento y la experiencia de todos y cada uno de sus países miembros , y en la que todo el mundo se dedica al objetivo común de mejorar el bienestar y la seguridad de todos nuestros ciudadanos,” afirmó el Secretario General de INTERPOL, Ronald Noble.

“Esta conferencia habrá aportado una contribución esencial para alcanzar tal meta, al poner de relieve el papel fundamental que desempeña Asia, tanto para INTERPOL como para la comunidad internacional de las fuerzas del orden”, añadió el Sr. Noble.

La INTERPOL del siglo XXI ha demostrado una y otra vez su importante contribución a la labor que llevan a cabo los organismos encargados de la aplicación de la ley de sus países miembros con miras a poner a presuntos delincuentes internacionales peligrosos en manos de la justicia. Por no citar más que el continente asiático, se han registrado los siguientes casos: detención en Tailandia del presunto agresor sexual de menores más buscado del mundo, Christopher Paul NEIL, en el marco de la operación VICO de INTERPOL; detención en Nepal de una persona sospechosa de efectuar trasplantes ilícitos de órganos, el Dr. Amit Kumar, tras la publicación de una notificación roja de INTERPOL a petición de la India; y, más recientemente, detención en Tailandia de Viktor Bout, acusado del delito de asociación ilícita destinada a suministrar apoyo material a cierta organización terrorista extranjera.

Estas detenciones fueron fruto de una estrecha cooperación policial internacional entre INTERPOL y una serie de funcionarios especializados de los organismos asiáticos encargados de la aplicación de la ley, que realizaron una excelente labor al identificar, localizar y detener a los interesados