La base de datos de INTERPOL sobre documentos de viaje perdidos o robados alcanza los diez millones de entradas

24 de enero de 2006

LYON (Francia) – Menos de cuatro años después de su creación, la base de datos de INTERPOL sobre documentos de viaje perdidos o robados contiene ya más de diez millones de registros.

Esta base de datos, que fue creada en junio de 2002, después de que INTERPOL y sus países miembros reconocieran la evidente relación entre las actividades terroristas y el uso de documentos de viaje perdidos o robados, cuenta ahora con información sobre pasaportes, cédulas de identidad, visados y otros documentos procedentes de 93 países y de la Misión de Administración Provisional de las Naciones Unidas en Kosovo.

Muchos de los documentos registrados en la Secretaría General están en blanco y por ello presentan un valor especial para los delincuentes pues, de esa manera, pueden insertar en ellos fotografías, descripciones y nombres falsos.

En diciembre de 2005 Suiza se convirtió en el primer país en el que entidades nacionales ajenas a su Oficina Central Nacional pudieron acceder a la base de datos de INTERPOL sobre documentos de viaje robados. En concreto, se autorizó el acceso a la misma a 20.000 agentes federales adscritos a puestos fronterizos, aduanas y oficinas de inmigración, embajadas y consulados, lo que les permite verificar al instante si un documento de viaje ha sido robado.

Esta solución integrada conecta las bases de datos suizas con las de la Secretaría General, por lo que no es necesario efectuar dos verificaciones y la información puede obtenerse con solo pulsar un botón.

En la actualidad se trabaja para seguir ampliando el acceso a la base de datos a los policías de todo el mundo que operan sobre el terreno y, se han puesto en marcha una serie de proyectos piloto en Europa, Asia y América.

Jean-Michel Louboutin, Director Ejecutivo de Servicios Policiales, afirmó que hace cuatro años esta base de datos no existía, lo que permitía a los delincuentes y los terroristas aprovechar lo que constituía una laguna capital en el ámbito de la seguridad fronteriza. El hecho de que INTERPOL haya recibido tanta información en tan poco tiempo, añadió, refleja la seriedad con la que los países miembros han abordado este problema.

El Sr. Louboutin manifestó que, aunque el hecho de contar con 10 millones de documentos en la base de datos es un logro importante, todavía quedan millones de ellos sin registrar. Y agregó que, a fin de velar por los demás países y por sus ciudadanos, cada país tiene la obligación de compartir esta información que puede resultar vital para evitar un atentado terrorista y capturar a delincuentes internacionales.

El Sr. Louboutin explicó que a través del I-24/7, el complejo sistema de comunicación de INTERPOL, los países disponen ya de una tecnología que permite a los funcionarios encargados de la aplicación de la ley acceder fácilmente desde puntos estratégicos, como aeropuertos y puestos fronterizos, a esta y a otras bases de datos.

La base de datos de INTERPOL sobre documentos de viaje robados ha contado con el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU, el G8, la Unión Europea, la Organización para la de Seguridad y la Cooperación en Europa, la Organización de Aviación Civil Internacional y los miembros de la Cooperación Económica Asia-Pacífico.

Desde su creación en 2002, los funcionarios que utilizan esta base de datos de INTERPOL han identificado más de 2.000 documentos de viaje robados.

Las fuerzas policiales de los 184 países miembros de INTERPOL pueden consultar la base de datos sobre documentos de viaje robados por medio de las Oficinas Centrales Nacionales de la Organización. Asimismo, a través del sistema I-24/7, los policías pueden acceder a una amplia gama de bases de datos, difusiones internacionales sobre personas buscadas y demás información policial de importancia crucial.