Carta del Presidente y el Secretario General de INTERPOL a la atención de todas las Oficinas Centrales Nacionales relativa a la 35ª Conferencia Regional Europea

12 de mayo de 2006

En la 34a Conferencia Regional Europea de INTERPOL, celebrada en mayo de 2005, representantes policiales de 45 países europeos se pronunciaron en favor de celebrar la Conferencia Regional Europea de 2006 en Belarrús.

La conferencia debía tener lugar en mayo de 2006. Los preparativos se iniciaron hace algún tiempo y ya se han completado.

En su reunión celebrada el 10 de abril de 2006 el Consejo de la Unión Europea de Asuntos Generales y Relaciones Exteriores aprobó una serie de conclusiones en relación con Belarrús tras las elecciones presidenciales, que habían tenido lugar el 19 de marzo de 2006.

El 4 de mayo de 2006 INTERPOL recibió una carta del Presidente del Comité de Representantes Permanentes de la Unión Europea (COREPER) en la que se le solicitaba que reorganizara la conferencia. Lamentablemente esta solicitud se presentaba sin previa consulta a INTERPOL y sin darle a ésta la oportunidad de esgrimir sus propios argumentos. No obstante, nos hacemos cargo de las difíciles circunstancias que han conducido a formular dicha solicitud.

Aunque cada vez es más evidente que la mayor parte de los países miembros de INTERPOL que son también miembros de la Unión Europea no enviarán delegaciones a la conferencia, INTERPOL ha recibido claras indicaciones de un número considerable de países de que tienen la intención de mandar a la misma a sus representantes. De hecho, incluso después de que el COREPER solicitara la reorganización de la conferencia, muchos países han reafirmado que, no obstante, van a asistir a dicha reunión. Se han recibido enérgicas notificaciones en las que se insta a INTERPOL a que continúe con el proyecto de celebrar la conferencia en Minsk.

Les escribimos para informarles de que, tras muchas deliberaciones, la 35ª Conferencia Regional Europea de Minsk tendrá lugar tal como se había previsto.

La Conferencia Regional Europea ofrece a los funcionarios encargados de la aplicación de la ley de sus países miembros europeos la oportunidad de reunirse y de reflexionar sobre nuevas formas de mejorar la comunicación y la cooperación transfronteriza. Asimismo, este encuentro es un foro en el que se adoptan importantes decisiones que afectan al trabajo policial que se lleva a cabo en la región europea de INTERPOL y en otros lugares.

La misión de INTERPOL es promover la comunicación y la cooperación entre los organismos encargados de la aplicación de la ley de todo el mundo. Su propio Estatuto prohíbe a la Organización toda actividad o intervención en cuestiones o asuntos de carácter político, militar, religioso o racial, lo que cada vez resulta más difícil de cumplir en un mundo crecientemente politizado, pero la neutralidad política es fundamental si INTERPOL quiere mantener su eficacia y cumplir su función básica de promover la cooperación internacional en el ámbito de la aplicación de la ley.

También es importante que INTERPOL conserve su independencia como organización internacional neutral y no se someta a la influencia de ningún país o grupo de países al margen de la que sus propios países miembros pueden ejercer a través de su Estatuto y demás textos normativos.

Hemos constatado que varios países miembros de la Unión Europea siguen manteniendo representaciones diplomáticas en Belarrús. La reunión de INTERPOL en este país tiene como objetivo apoyar la cooperación policial a escala internacional y respetar el estado de derecho y, por lo tanto, resultará beneficiosa para los ciudadanos de Belarrús y de toda la comunidad internacional.

La experiencia diaria de INTERPOL demuestra que la cooperación y el intercambio de información en materia de aplicación de la ley a escala internacional son posibles incluso en aquellos casos en que las relaciones diplomáticas entre los países son problemáticas o inexistentes.

La lucha contra el terrorismo y otros delitos transnacionales de carácter grave exige la cooperación policial internacional, con independencia de las diferencias políticas que existan entre los gobiernos. Cuanto más amplia e intensa sea la cooperación policial, más eficaz será esta lucha. 

Por definición, el terrorismo y otros delitos transnacionales graves no respetan fronteras y, por ello, es absolutamente imprescindible que INTERPOL siga actuando a escala internacional al servicio de la comunidad mundial.

Es de vital importancia que continuemos trabajando todos juntos para hacer del mundo un lugar más seguro en beneficio de todos nuestros ciudadanos y comunidades. Habida cuenta de las amenazas que plantean el terrorismo y otros delitos transnacionales de carácter grave, no podemos permitirnos excluir de nuestros canales de información a las fuerzas policiales de ningún país. De hecho, incumpliríamos nuestro deber si así lo hiciéramos.

Por estas y otras razones, queremos transmitirles nuestro apoyo incondicional y animarles a que envíen una delegación apropiada a la Conferencia Regional Europea de Minsk (Belarrús).