Un niño ruso secuestrado es rescatado gracias a información aportada por la red de INTERPOL

Gracias a información policial recibida y analizada por la unidad de INTERPOL de Delitos contra Menores, las fuerzas especiales rusas rescataron a un niño de siete años que se encontraba secuestrado.

El niño llevaba desaparecido desde el 28 de septiembre, cuando no regresó a casa tras la salida de la escuela. Su desaparición se produjo en algún punto del trayecto de 200 metros que separaba la parada del autobús escolar y su hogar en Gorki.

El 10 de noviembre, sin ningún conocimiento previo sobre el caso, unos policías estadounidenses lograron establecer un posible vínculo entre un destacado usuario de la red oscura y el secuestro perpetrado en Rusia. Los agentes alertaron inmediatamente a la red de especialistas en protección de la infancia de INTERPOL.

La comunidad internacional de las fuerzas del orden se movilizó, y las fuerzas policiales de varios países proporcionaron información a fin de encontrar pistas que permitieran localizar tanto al usuario como a la joven víctima. Considerando que esta aún estaba viva, la unidad de INTERPOL de Delitos contra Menores analizó minuciosamente enormes cantidades de datos, y comunicó la información policial pertinente a través de la Oficina Central Nacional de INTERPOL en Moscú y la Base de Datos Internacional de INTERPOL sobre Explotación Sexual de Niños (ICSE).

Gracias a esta información, las fuerzas especiales rusas pudieron reducir su ámbito de búsqueda. Finalmente identificaron al sospechoso y asaltaron la vivienda en la que el niño estaba retenido, y pusieron al menor a salvo.

El Secretario General de INTERPOL, Jürgen Stock, felicitó a todos los participantes en la operación, declarando: “Gracias a la dedicación de agentes especializados y a la rápida actuación de las autoridades de todo el mundo, hoy un niño ha vuelto a donde debe estar: con su familia”.

“Si bien es una grandísima satisfacción para nosotros que este caso haya tenido un final feliz, muchos niños siguen esperando ser rescatados. Los éxitos de este tipo no hacen sino renovar el compromiso de INTERPOL de facilitar la comunicación entre sus países miembros para proteger a los niños de sus agresores”, añadió el Secretario General de INTERPOL.

La unidad de INTERPOL de Delitos contra Menores colabora estrechamente con las unidades especializadas de los países miembros de esta organización policial, prestando apoyo a las investigaciones en todo el mundo mediante la identificación de víctimas, el análisis de datos y la provisión de formación y de herramientas especializadas como la base de datos ICSE.