MANILA (Filipinas) – El equipo especializado que INTERPOL envió a la 30ª edición de los Juegos del Sudeste Asiático para prestar ayuda a las fuerzas del orden de Manila descubrió más de 120 posibles peligros, lo que dio lugar a la detención de prófugos internacionales.
El equipo de INTERPOL de apoyo para grandes acontecimientos participó en la infraestructura de seguridad de los Juegos creada por Filipinas preparando, coordinando y poniendo en práctica medidas de seguridad para prevenir y tratar las amenazas terroristas y los delitos graves que pudieran presentarse.
Este equipo, ubicado en un centro de mando especial y en el aeropuerto internacional Ninoy Aquino de Manila, respaldó a los servicios de inmigración y a la Oficina Central Nacional de INTERPOL reforzando el control de pasajeros y de documentos de viaje en los aeropuertos y los puestos de control fronterizo en los que se empleaban las capacidades policiales mundiales de INTERPOL.
Las más de cuatro millones de búsquedas efectuadas en las bases de datos de INTERPOL por el equipo permitieron descubrir más de 120 peligros potenciales, resultantes de las coincidencias halladas en la Base de Datos de INTERPOL sobre Documentos de Viaje Robados y Perdidos (SLTD) y en otras bases de datos que recogen información sobre delincuentes buscados a escala internacional. El equipo fue enviado a Manila en el marco del proyecto Riptide de INTERPOL, que tiene por objeto impedir los desplazamientos de combatientes terroristas extranjeros en el Sudeste Asiático.
Detención de prófugos
Los cotejos generaron además pistas de investigación, como ocurrió con más de 25 personas buscadas internacionalmente, al ser objeto de notificaciones rojas de INTERPOL, por delitos como el asesinato, la estafa, el soborno, el tráfico de armas y de drogas y los delitos contra menores.
Cabe destacar el caso de siete fugitivos coreanos buscados por diversos delitos, entre ellos agresión, estafa y delitos de alta tecnología, que fueron identificados por el equipo de INTERPOL al comprobar los datos de entradas y salidas de los aeropuertos de Manila y Cebú. Los siete fueron detenidos, y extraditados a la República de Corea.
También se detectó a un británico buscado por delitos contra menores cuando salía de Filipinas con destino al Reino Unido, que fue detenido en cuanto pisó tierras británicas.
“Para que la policía pueda garantizar la seguridad de grandes acontecimientos, es esencial que tenga toda la información que necesita en el momento adecuado y en el lugar adecuado, y especialmente en los puestos de control de fronteras. Empleando la red mundial de INTERPOL, Filipinas ha podido ampliar su perímetro nacional de seguridad mucho más allá de sus lindes. Las iniciativas como el proyecto Riptide son fundamentales para que los agentes puedan asegurar sus fronteras haciendo pleno uso de las capacidades policiales de INTERPOL”, afirmó Hans Jürgen Pechtl, integrante de la unidad de INTERPOL de Apoyo Operativo y Análisis.
Coincidencias faciales confirmadas
El trabajo del equipo de INTERPOL permitió proceder a las detenciones también y demostró también la eficacia de Sistema de INTERPOL de Reconocimiento Facial, una aplicación automatizada de software que coteja fotografías de sospechosos con los datos biométricos recogidos en las bases de datos mundiales de INTERPOL.
En las dos semanas que pasó el equipo en Filipinas, los especialistas en reconocimiento facial obtuvieron 18 resultados positivos al cotejar las fotografías de sospechosos con los datos biométricos de las bases de datos de INTERPOL.
En una ocasión, se descubrió a una persona que intentaba salir de Manila con un pasaporte que en la base de datos SLTD figuraba como robado. Poco después, con el software de INTERPOL de reconocimiento facial se comprobó que el rostro de esta persona no era el mismo que el que figuraba en la fotografía del pasaporte, por lo que rápidamente se procedió a la detención del viajero, que permaneció detenido en espera de los resultados de la investigación.
El Centro de Mando y Coordinación de INTERPOL, que está operativo 24 horas al día, y otras unidades especializadas de esta organización policial se mantuvieron en alerta mientras duraron los Juegos para proporcionar la ayuda que pudiera ser necesaria y ponerse en comunicación con cualquiera de sus 194 países miembros.
Proyecto Riptide
Se trata de un proyecto del Grupo de INTERPOL Especializado en Gestión Integrada de Fronteras dedicado específicamente a los combatientes terroristas extranjeros, que tiene por finalidad prestar ayuda a las fuerzas del orden de Indonesia, Malasia y Filipinas para identificar a estos combatientes e impedir su paso por las fronteras terrestres, aéreas y marítimas de la región. Las dos fases están financiadas por Japón.
En la ejecución de este proyecto, INTERPOL coordina diversas operaciones de seguridad de fronteras para controlar a los viajeros comprobando sus datos en las bases de datos policiales que tiene sobre personas buscadas, notificaciones y documentos de viaje robados y para reforzar la cooperación en la gestión de fronteras nacionales y regionales.
Los objetivos del proyecto Riptide reflejan los de la estrategia mundial de INTERPOL de lucha contra el terrorismo, por la que se pretende ayudar a los países miembros a reducir el movimiento transfronterizo de los terroristas. A este respecto, el proyecto también anima a los países participantes a intercambiar por conducto de INTERPOL, a escala mundial, datos sobre terroristas presuntos o confirmados.
Países participantes
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