La lucha contra la corrupción en el sector forestal, objetivo de un curso de INTERPOL en Argentina

15 de abril de 2016

BUENOS AIRES (Argentina) – Combatir la corrupción en el sector forestal fue el tema central de un curso impartido por INTERPOL en Argentina.

El 14º Programa mundial de INTERPOL sobre la lucha contra la corrupción, la delincuencia financiera y la recuperación de activos reunió a 35 participantes de servicios de policía, unidades de información financiera, organismos encargados de la aplicación de las leyes forestales y medioambientales, y unidades anticorrupción de nueve países: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay.

El objetivo de este curso de cinco días de duración (11-15 de abril), impartido en la Oficina Regional de INTERPOL para América del Sur, era reforzar la capacidad de los participantes para prevenir, detectar e investigar la corrupción y otros delitos financieros conexos que afectan al sector forestal en sus respectivos países.

“En la historia de América Latina ha prevalecido la explotación de los recursos naturales, y la deforestación es quizá uno de los ejemplos más claros de los efectos de la corrupción”, declaró Rafael Peña, Jefe de la Oficina Regional de INTERPOL en Buenos Aires.

“Con este programa de formación INTERPOL espera facilitar el establecimiento de alianzas estratégicas entre los expertos de la región de las Américas para combatir el problema de la corrupción relacionada con los delitos forestales”, añadió.

Este curso, organizado por la Subdirección de Anticorrupción y Delincuencia Financiera de INTERPOL (AFC), en colaboración con su Proyecto LEAF (Law Enforcement Assistance for Forests, ayuda a la aplicación de las leyes forestales) destinado a combatir la tala ilegal en todo el mundo, contó también con el apoyo del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (GAFILAT)

A través del proyecto LEAF, INTERPOL ha estimado que, a causa de la corrupción en el sector forestal mundial, los gobiernos de todo el mundo dejan de ingresar anualmente unos 30 mil millones de dólares.

James Anderson, Jefe de la Subdirección de Anticorrupción y Delincuencia Financiera de INTERPOL, hizo hincapié en la manera en que “la corrupción ayuda a los delincuentes a traficar fácilmente con bienes como la madera, lo que supone una importante pérdida de recursos y de ingresos para los gobiernos y las economías de los países en desarrollo, así como para las poblaciones locales”.

Esta formación ha recibido financiación de la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo (NORAD) y del proyecto GAFILAT-Unión Europea.