INTERPOL ofrece ayuda a Haití tras un devastador terremoto

15 de enero de 2010

LYON (Francia) – INTERPOL ha ofrecido todo su apoyo y ayuda a Haití y a otros países cuyos ciudadanos han sufrido los efectos del devastador terremoto que ha causado decenas de miles de muertos y heridos.

El Centro de Mando y Coordinación de INTERPOL, operativo las 24 horas del día, se ha prestado a facilitar y coordinar el intercambio a escala internacional de mensajes policiales acerca de personas desaparecidas que han podido ser víctimas de esta catástrofe.

El lunes, 18 de enero se enviará a Haití un equipo integrado por expertos en identificación de víctimas de catástrofes (IVC) y en otros campos, que prestará ayuda a las autoridades nacionales para evaluar las necesidades en materia de IVC. Asimismo, en caso necesario, la Secretaría General de INTERPOL, sita en Lyon (Francia), a través de sus 188 países miembros, puede también ayudar a coordinar el envío de otro tipo de ayudas especializadas.

“Sin duda, la prioridad en este momento es encontrar y rescatar al mayor número posible de víctimas, y llevar a cabo las operaciones de ayuda humanitaria”, ha declarado Brian Minihane, Director de Apoyo Policial Operativo de INTERPOL.

“Pero cuando se hayan terminado las operaciones de rescate, INTERPOL está dispuesta a ofrecer todo el apoyo y la asistencia necesarios para ayudar a localizar a los desaparecidos e identificar a las víctimas”.

“La ayuda y la coordinación internacionales tienen una importancia crucial, y el sistema mundial de comunicación policial de INTERPOL, así como nuestra experiencia previa en este tipo de asistencia, pueden desempeñar una función fundamental”, ha añadido el Sr. Minihane.

INTERPOL ha aportado ayudas similares tras otras catástrofes recientes, como el hundimiento de un transbordador en Cebú (Filipinas), ocurrido en junio de 2008, que provocó la muerte de unas 800 personas. En diciembre de 2004 INTERPOL lanzó su mayor operación de respuesta operativa hasta la fecha tras el maremoto que asoló el Sureste de Asia, prestando apoyo en materia de coordinación, logística y comunicación, a los países afectados y a los equipos dedicados a la identificación de las víctimas.