Las fuerzas del orden se enfrentan a un aumento mundial de los ataques de ransomware y de los delitos organizados violentos

8 de julio de 2021
La pandemia delictiva mundial exige una respuesta policial coordinada

Lyon (Francia) – Ante la evolución del panorama delictivo, los avances tecnológicos y la pandemia, que ha sacudido los cimientos de la labor policial, los altos mandos policiales de todo el mundo han adoptado medidas para potenciar la función de las Oficinas Centrales Nacionales (OCN) como enlace entre INTERPOL y los agentes de primera línea.

Del 6 al 8 de julio, unos 300 altos mandos policiales de 167 países se reunieron por medios virtuales en el marco de la 16ª conferencia anual de las OCN, en la que examinaron diversas iniciativas de envergadura, desde el apoyo a las operaciones e investigaciones hasta la ampliación del sistema I-24/7, la red de comunicación protegida de INTERPOL, para dar acceso a los organismos policiales nacionales y los servicios de control de fronteras.

La finalidad de estas medidas es optimizar los resultados y la capacidad operativa de las OCN, así como mejorar la cooperación policial internacional por conducto de INTERPOL para luchar contra la delincuencia y la corrupción transnacionales.

“Pese a la pandemia, el volumen de datos que las OCN han confiado a INTERPOL en el último año ha aumentado un 10 %, hasta alcanzar una cifra récord de 115 millones, lo que evidencia que las OCN siguen siendo esenciales para nuestro sistema mundial de alerta rápida”, declaró Jürgen Stock, Secretario General de INTERPOL.

Los delitos graves están evolucionando al ritmo de la pandemia, como se pudo ver en la reunión, en donde se informó de que, según los datos recabados por Chainalysis, las actividades de ransomware habían generado 350 millones de dólares estadounidenses en 2020, lo que supone un aumento del 311 % con respecto al año anterior.

“Es fundamental combatir el ransomware con una estrategia mundial, con la que logremos generar confianza, favorecer el intercambio eficaz de datos y maximizar la asistencia operativa rápida a los organismos encargados de la aplicación de la ley”, añadió Stock.

Teniendo presente que los Miembros de la Organización tenían previsto reunirse el 12 de julio con colaboradores clave de los sectores público y privado en el Foro de Alto Nivel sobre Ransomware organizado por INTERPOL, Paulette Green, Jefa de la OCN de Jamaica y comisaria de la policía jamaicana, hizo estas declaraciones:

“Los organismos encargados de la aplicación de la ley deben ser conscientes de que en el mundo entero siempre habrá nuevas formas y medios de cometer un delito por medio del ciberespacio, y de que deben crear continuamente estrategias para hacerles frente de forma adecuada. El factor tiempo es importante en las pruebas procedentes del ciberespacio; en la investigación de cualquier tipo de delito, las fuerzas del orden deben poder aprovechar esas oportunidades rápidamente”.

Sobre el tema del terrorismo, el Secretario General de INTERPOL afirmó que este delito está en una encrucijada, ya que, tras la derrota territorial del Dáesh, se abre una nueva fase de insurgencia en el Próximo Oriente, mientras que en otros importantes escenarios, como África, han aparecido otros grupos que se han unido al movimiento terrorista y luchan contra Al Qaeda por la supremacía.

Los altos mandos oficiales fueron asimismo informados de las últimas novedades sobre el proyecto I-CAN, la iniciativa de INTERPOL de tres años de duración financiada por el Departamento de Seguridad Pública de Italia concebida para combatir a la organización delictiva de tipo mafioso ‘Ndrangheta.

Bruno Eduardo Samezima, Jefe de la OCN de Brasil y Director de la Policía Federal brasileña, señaló que, gracias a la cooperación internacional favorecida por la iniciativa I-CAN, las autoridades brasileñas pudieron detener en mayo al capo de la mafia Rocco Morabito, condenado por la justicia italiana y huido de ella, y aprovechó para añadir lo que sigue:

“I-CAN es uno de los proyectos de naturaleza operativa más importantes que INTERPOL ha llevado a cabo en los últimos años. Puede ser un verdadero punto de inflexión en el ámbito de la lucha mundial contra la delincuencia organizada transnacional, asentado sobre una base cíclica que puede servir de referencia para otras iniciativas de INTERPOL en el futuro”.

Al término de la reunión se hizo un llamamiento a los países miembros para establecer alianzas regionales basadas en esfuerzos recíprocos que condujesen al fortalecimiento de la cooperación policial internacional.