LA HAYA (Países Bajos) – En nuestro mundo cada vez más interconectado, los efectos de la ciberdelincuencia pueden ser rápidos, de gran alcance, y devastadores para sus víctimas.
A fin de ayudar a las policías a hacer frente a los problemas que plantea la prevención e investigación de estos delitos a escala mundial, la 7ª Conferencia sobre Ciberdelincuencia de Europol e INTERPOL congregó a expertos en la materia provenientes de las fuerzas del orden, el sector privado, organizaciones internacionales y el mundo académico, que debatieron en profundidad las amenazas, las tendencias y las estrategias detectadas más recientemente en este ámbito.
Bajo el lema “Las fuerzas del orden en un futuro interconectado”, esta reunión de tres días de duración (del 9 al 11 de octubre) se centró en las últimas novedades tecnológicas que podrían ser aprovechadas por los delincuentes, pero que también pueden aprovechar los servicios policiales.
Entre los principales temas abordados figuraban las ventajas y retos que supone para la policía la inteligencia artificial, las posibles repercusiones de la tecnología 5G, el acceso transfronterizo a las pruebas electrónicas, los obstáculos a la cooperación internacional en las investigaciones sobre ciberdelincuencia, la importancia del desarrollo de capacidades para combatir la ciberdelincuencia, las tendencias y los retos de las criptomonedas, el uso de inteligencia de fuentes abiertas, y la privacidad.
Ante el hecho de que los ciberdelincuentes evolucionan y cambian de táctica constantemente, Craig Jones, Director de Ciberdelincuencia de INTERPOL, afirmó que, hoy más que nunca, se cuestiona el modelo de actuación policial tradicional.
“El mundo de la ciberdelincuencia es ágil, se amolda, se conecta y coopera según pautas que hace solo unos pocos años no habríamos siquiera imaginado”, señaló Jones.
“Las fuerzas del orden deben adaptarse a este entorno delictivo en constante evolución, a fin de proteger eficazmente a nuestras sociedades en el ciberespacio”, concluyó.
Durante la ceremonia de apertura, Jones lanzó la campaña de INTERPOL “#BECareful”, para concienciar acerca de las estafas denominadas en inglés “BEC” (siglas de business e-mail compromise) unas estafas a empresas por e-mail mediante suplantación de identidad. En esta campaña, de un mes de duración, se informará al público acerca de este tipo de estafa en expansión y se facilitará consejos para no caer víctima de ella.
Asimismo, durante la conferencia INTERPOL presentó las conclusiones de su primer informe de evaluación dedicado a la ciberdelincuencia. En él se analizan las últimas tendencias de este ámbito delictivo detectadas en distintas regiones del mundo, a partir de información proporcionada por los países miembros y el sector privado y de inteligencia de fuentes abiertas.
Una de las tendencias percibidas ha consistido en la sustitución de los malware dirigidos contra ordenadores por ataques contra dispositivos móviles, debido a que estos se utilizan cada vez con mayor frecuencia como plataformas de pago.
En respuesta al aumento de casos de “criptosecuestro” (cryptojacking en inglés), por el que los delincuentes acceden remotamente al sistema de la víctima utilizando malware a fin de secuestrar sus recursos informáticos para producir criptomonedas, INTERPOL ha difundido más de 170 informes sobre la cibercriminalidad en los que facilita recomendaciones con miras a prevenir este delito y mitigar sus efectos.
Steven Wilson, jefe del Centro Europeo de Ciberdelincuencia de Europol (EC3) declaró: “En estos tres días de conferencia compartidos con socios de las fuerzas del orden, el sector privado y el ámbito académico, hemos constatado lo que puede lograrse cuando se colabora en la lucha contra el problema mundial que constituye la ciberdelincuencia”.
Todos estos elementos son necesarios para poner freno a las actividades de las organizaciones delictivas y reducir la amenaza en línea que acecha a las empresas, las administraciones públicas y, sobre todo, a los ciudadanos de la Unión Europea. Espero con interés el momento en que comencemos a mejorar la respuesta internacional a este problema cada vez más grave aprovechando las relaciones de confianza que nos unen”, añadió Steven Wilson.
La conferencia, que reunió a unos 400 delegados procedentes de 70 países, ofreció además a Europol e INTERPOL la oportunidad de volver a confirmar su firme compromiso de seguir colaborando en la lucha contra la ciberdelincuencia.
La Conferencia de Europol e INTERPOL sobre Ciberdelincuencia es una iniciativa conjunta comenzada en 2013. Tiene lugar anualmente, y su celebración se confía en años alternos a cada organización.
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